¿Sale de verdad tan caro utilizar el aire acondicionado para climatizar espacios?

Uno de los debates activos más importantes que se llevan a cabo en los hogares cuando se acerca el frío es el referido a qué tipo de calefacción se debe instalar.

En un escenario donde los calefactores a gas o gasóleo han dominado el mercado durante años, los aires acondicionados se empiezan a abrir camino y en esta entrada averiguamos a qué se debe que cada vez sean más las personas que apuestan por este método de calefacción.

¿Qué es un aire acondicionado?

Son versátiles equipos de climatización por aerotermia, que permiten la emisión de aire frío y caliente. Por tanto, superan a la competencia en el sentido de que aquellos sólo son útiles durante el invierno. Para cumplir su función, estos equipos cuentan con una bomba de calor. La bomba de calor, a diferencia de lo que se puede creer, no genera calor, sino que se encarga de trasladarlo. Dicho de otro modo, se encarga de tomar el aire caliente del exterior y llevarlo hacia el interior cuando se utiliza como calefacción.

El proceso anterior ya supone, en sí mismo, una reducción de energía, puesto que la generación de calor es un proceso menos eficiente que el traslado. Por otra parte, numerosos estudios han corroborado que cada KW consumido por estos equipos es capaz de triplicar el rendimiento en relación con otros sistemas de calefacción. Un análisis realizado por Toshiba en 2018 demostró, mediante la comparativa en Madrid de tres sistemas de calefacción: aerotermia, caldera de condensación y caldera de gasóleo, que el primero de ellos podía reducir los costes hasta un 25 % en relación con el más barato de los otros dos restantes.

El termostato, otro potente aleado

Uno de los mecanismos que más repercute en la disminución del consumo energético de los equipos de aerotermia es el termostato.

El termostato en el componente capaz de programar el tiempo de trabajo del equipo, además de hacer funcionar el sistema sólo cuando la temperatura del local se encuentre fuera del rango establecido por el usuario. De este modo, es posible aprovechar los horarios donde la tarifa eléctrica es más económica o bien optimizar el uso de los equipos en momentos determinados del día. Del mismo modo, permite el acondicionamiento del clima de los locales incluso antes de que tengamos presencia allí.

Otras ventajas que repercuten en el costo

Hasta ahora hemos visto cómo el uso de los equipos de calefacción basados en aerotermia representa un ahorro económico por consumo en relación con el resto de los métodos que conocemos. Sin embargo, cuando realizamos reformas o simplemente si estamos decidiendo cambiar nuestro antiguo equipo, debemos tener en cuenta otras ventajas que, al final, también redundan en un ahorro económico.

En primer lugar, resulta útil aclarar que la instalación de estos sistemas es mucho más económica que la de calderas, ya que no precisan de obras o reformas, los conductos son, en su mayoría externos y un taladro será la herramienta suficiente para su instalación. Por lo general, su elección suele representar un ahorro de unos mil euros en comparación con la instalación de otros sistemas. Además de que con su compra garantizas ambas funcionalidades: frío y calor, mientras que con otro equipo de calefacción sólo garantizas la generación de calor, pero en verano necesitarás de otro sistema de climatización.

Sumemos a ello la posibilidad de acoplar varios termostatos en habitaciones diferentes, de modo tal que eliminamos el inconveniente de un termostato general y por tanto tiene una repercusión inmediata en la disminución del consumo por concepto de balance de temperatura. Además, agreguemos el factor de ahorro en reparaciones, estos sistemas por lo general no necesitan revisiones periódicas de técnicos profesionales, sino que el propio usuario puede realizar un mantenimiento elemental sin tener grandes conocimientos del equipo.

¿Hay algún inconveniente con las bombas de calor?

Ningún sistema de calefacción es infalible, por tanto las bombas de calor también tienen un punto débil y es el rango de temperaturas exteriores en el que son eficientes. Estamos diciendo que, cuando la temperatura exterior o ambiental se coloca por debajo de 0 grados Celsius, la bomba de calor se convierte en un componente poco eficiente, ya que necesitará de un esfuerzo y consumo mayor para trasladar aire caliente hacia el interior.

Consideraciones finales

Después de analizar detalladamente las ventajas que supone la instalación de sistemas aerotérmicos frente a calderas de gas, gasóleo, pellets, radiadores y otros métodos convencionales, podemos llegar a la conclusión de que, incluso cuando el precio de adquirir el equipo sea superior, a largo plazo representa un ahorro considerable.

Por tal razón, nosotros aconsejamos que la próxima vez que te corresponda elegir un sistema de calefacción para la oficina o el hogar, apuestes fuertemente por la aerotermia.