Los costes en la factura de la luz, en los últimos años y debido a la subida del precio de la electricidad, se han convertido en una pesadilla para muchos hogares. En el caso del uso del aire acondicionado, no se nota tanto en invierno, época en la que para calentarse se utilizan otras tecnologías, pero sí en verano, cuando prácticamente la única opción para refrescar una estancia pasa por utilizar los equipos de aire acondicionado tipo split o portátiles. Ese uso, si no se realiza con inteligencia, puede traer desagradables sorpresas en la factura de la luz.
Para evitarlo, al menos en gran medida, no viene mal hacer caso de los siguientes consejos.
Invertir en equipos eficientes
A la hora de comprar un equipo, lo barato puede salir caro. Es decir, el ahorro en la compra puede convertirse en gasto en la factura de la luz por la poca eficiencia del equipo. ¿Cómo evitarlo? Al comprar el equipo split o portátil, es importante fijarse en la etiqueta energética y comprobar que en la descripción hay una letra A y una barra verde.
Estos son los símbolos que la Unión Europea ha impuesto utilizar a los fabricantes para especificar que el equipo posee eficiencia energética. Comprar un equipo con los símbolos mencionados, de media, permite ahorrar hasta tres veces más en energía que los equipos denominados tipo G o con menor eficiencia energética.
Ubicación de los equipos
Los equipos llamados split compuestos de dos partes (condensador en el exterior y evaporador en el interior) son los más utilizados por contar con una mayor capacidad de refrigeración con menor uso de electricidad.
No obstante, para optimizar más esa ventaja, es importante no colocar la parte externa o condensador en zonas donde le dé mucho el sol o haya otros equipos que desprendan calor. Con ello se logrará aumentar su eficiencia.
Programar el termostato a 24ºC
Es muy común que los usuarios, cuando hace mucho calor, programen el termostato del equipo a temperaturas bajas confiando en reducir la temperatura ambiente más rápido. Esto es un error y, además, se consume mucha más energía ya que se fuerza al condensador.
En este sentido, el Ministerio de Industria, La Fundación de la Energía de la Comunidad de Madrid y otras entidades y asociaciones especializadas en consumo recomiendan programar el termostato a 24ºC para estabilizar la temperatura interior de una estancia de forma paulatina y al menor coste energético.
Mantenimiento de los equipos
De nuevo, aunque llamar a un técnico para que haga una revisión de los equipos cada cierto tiempo puede parecer un gasto, de hecho, supone un ahorro porque se va a conseguir la máxima eficiencia de los mismos y mantener ese ahorro constante. Entre los aspectos de mantenimiento más importantes se encuentra el de mantener limpio el filtro del aire.
Utilizar equipos con tecnología Inverter
Los equipos sin esta tecnología se apagan y se encienden –incluso de forma automática- cuando la temperatura ambiente baja o sube de lo programado.
Esto puede parecer una manera de ahorrar, aunque realmente se produce el efecto contrario ya que el proceso de arranque de un equipo es lo que más energía consume. Por el contrario, la tecnología Inverter regula la potencia del compresor para que aumente la potencia o la reduzca pero sin llegar a apagar el equipo. Con ello, este tipo de tecnología permite ahorrar hasta un 40% de energía en relación a equipos convencionales.
Hábitos cotidianos recomendables
Además de lo dicho anteriormente, hay otros trucos que se pueden aplicar en el día a día y especialmente en verano para que la temperatura de la casa o la oficina esté lo más baja posible:
- Abrir las ventanas y puertas de la casa u oficina a primera hora de la mañana cuando la temperatura es más baja.
- Hacer lo contrario cuando empiece a dar el sol en las estancias a enfriar, bajando persianas e, incluso, colocando toldos.
- Durante las horas de mayor calor, cerrar las puertas de las estancias donde no se realicen actividades para evitar que entre el calor y se escape el frescor.
- Contar con paredes blancas hace que los rayos del sol se reflejen y se mantengan más frescas.
¿Cuánta energía en el uso de aire acondicionado se puede ahorrar utilizando estos trucos? De forma conservadora, se puede llegar a un 50%, con el ahorro que eso supone en la factura total de electricidad.