Cada día desperdiciamos energía en nuestros hogares. Esto no solo supone un mayor gasto en nuestras facturas mensuales, sino un abuso de los recursos limitados del planeta y un aumento de la contaminación. Muchos de nuestros electrodomésticos, sobre todo aquellos que tienen más años, no son eficientemente sostenibles y consumen más energía de la correspondiente. Y es aquí donde aparece la eficiencia energética, que vela por un uso responsable de nuestros electrodomésticos. ¿Cómo? Creando productos que consumen una menor cantidad de energía al realizar sus funciones.
¿Esto significa que estos electrodomésticos tienen menor potencia? Es decir, ¿si, por ejemplo, compro un aire acondicionado en Madrid de eficiencia energética es menos eficaz que otro que no la tiene? No, ambos son igual de potentes y con las mismas funciones, pero el primero tiene un consumo mucho menor de energía. La eficiencia energética surgió ante la necesidad de controlar el exceso de energía desperdiciado y ha apostado fuerte por un uso racional y responsable de los electrodomésticos. Por tanto, más que una moda es una responsabilidad.
¿Qué significan las etiquetas energéticas?
Seguro que más de una vez has visto en una tienda o centro comercial etiquetas de diferentes colores junto a los electrodomésticos. Y, además, cada color va acompañando a una letra. Asimismo, podemos ver en esta misma etiqueta un pequeño listado desde la A a la G, lo que se resume de más a menos eficiencia, respectivamente. Siendo la A la más respetuosa con el medio ambiente y la E, F y G las que menos lo son, llegando incluso a consumir entre un 100 y un 125% más de la energía que necesitamos para que el electrodoméstico funcione correctamente. Por tanto, estas letras y colores son unos excelentes indicadores del consumo energético del producto. Y lo mejor es que las podemos encontrar en prácticamente todos los electrodomésticos a la hora de comprarlos.
Es cierto que los productos con eficiencia energética suelen ser más caros que los que no la tienen, pero tanto a corto como a largo plazo saldremos ganando, sobre todo económicamente, ya que mes a mes iremos viendo como la cantidad de nuestras facturas disminuyen. Las etiquetas son un excelente identificador del consumo del electrodoméstico. ¡Aprovecha la oportunidad de informarte antes de adquirir cualquier producto a través de la etiqueta! Si vas a adquirir un nuevo electrodoméstico y quieres ahorrar en la factura, observa antes la letra de la etiqueta.
¿Por qué es necesario ahorrar energía?
Seguro que ya has escuchado más de una vez que los recursos del planeta son limitados y desgraciadamente los estamos agotando. Cada año la población aumenta notablemente en cada uno de los continentes y por ello es fundamental reducir el consumo de energía. Podemos disfrutar de nuestros electrodomésticos y de las nuevas tecnologías, pero siempre teniendo en cuenta que su uso debería conllevar un consumo responsable por nuestra parte. Actualmente los fabricantes están cada vez más concienciados de la realidad y apuestan por fabricar electrodomésticos sostenibles. A nosotros nos basta con modificar nuestros hábitos diarios y optar por productos eficientes.
La eficiencia energética no es por tanto una moda, sino una necesidad. Sostenibilidad y ahorro son importantes para todos y es necesario defender un consumo controlado. Si necesitas un aire acondicionado escoge aquel que te ofrezca las mejores prestaciones, pero con una eficiencia responsable. Con la compra de estos productos reduciremos el impacto ambiental y se espera que en los próximos años prácticamente toda la población tenga electrodomésticos de esta clase, para reducir al máximo el consumo de energía. Además, si utilizamos electrodomésticos que empleen agua, como las lavadoras, también se reducirá la cantidad utilizada y ello repercutirá favorable y nuevamente en nuestras facturas.
